La banda detenida obtuvo millones de pesos con los que compraron yates, cuatriciclos, vehículos y motos de agua, entre otros objetos, a través de compras falsas con 600 tarjetas de débitos.
Dos funcionarios de la Dirección General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires fueron detenidos por utilizar cientos de tarjetas de débito del organismo para obtener vehículos, embarcaciones deportivas y dinero en efectivo, en el marco de una causa que investiga una millonaria malversación de fondos públicos.
Los detenidos son Gustavo Chirambero, sindicado en la investigación por estar en lo alto de una organización delictiva encargado de la distribución y acopiamiento de dinero producto de la malversación del patrimonio público y Diego Burgos, segundo al mando de la organización.
También fueron aprehendidos Néstor Casado y Horacio Gabriel Makowski, jefes del Departamento de Combustible y Automotores, quienes finalmente no quedaron detenidos tras presentar ante la Justicia un pedido de eximición de prisión.
Durante la investigación se comprobó que estos funcionarios desviaban en forma periódica fondos públicos a partir de falsas compras de combustibles en una estación de servicio. También se detalló que varias tarjetas correspondían a autos que no estaban en funcionamiento.
Se explicó que las detenciones ocurrieron tras una serie de allanamientos que se hicieron en La Plata y Berisso, en los que se secuestraron los bienes, en la causa que instruye el fiscal penal de La Plata, Juan Cruz Condomí Alcorta.
Al parecer, la banda operaba con más de 600 tarjetas de débito, con las cuales obtuvieron millones de pesos para comprar bienes que terminaron siendo personales y también para adquirir un flujo importante de efectivo.
Desde la investigación sospechan que en la malversación podrían estar involucrados también otros empleados de la estación de servicio, ya que un día después de la detención de Cejas se suicidó el encargado general de ese comercio, Maximiliano Normann, de 44 años.
«La maniobra viene desde 2014, según la investigación, por lo que se puede decir que es millonaria la malversación de caudales en perjuicio de la administración pública provincial», afirmó el fiscal.
También se secuestraron un yate, un motor home, cuatriciclos, motos de agua, motos de alta cilindrada y automóviles, entre ellos varios de alta gama, y un arma. Asimismo se estima que los montos provenientes del erario provincial para dichas tarjetas ascendían en forma semanal desde 250.000 a 1.000.000 de pesos.